Que una empresa de ropa de tamaño pequeño aguante estos malos momentos económicos es motivo de satisfacción. Más aún si es de aquí al lado, la forma una gente extraordinaria y con unas ganas increíbles de hacer cosas. Mi más sincera enhorabuena a Ewan por seguir en la brecha.
Y gracias también a Amar y a todos los que han hecho posible la campaña, ha quedado preciosa.